Es una ciudad multicultural, donde se repita libertad, enclavada en un entorno natural exhuberante. La capital de “la nación del arcoiris” mira al mar y está a los pies de la omnipresente Table Mountain.
Supo ser el punto de conexión entre el Atlántico y el Indico, y aún conserva el esplendor de esos tiempos de expediciones. No dejes de probar sus vinos, caminar sus playas salvajes de arena blanca y sus barrios de encanto.
Sin duda te enamorarás de la amabilidad de su pueblo y su clima agradable todo el año.
es el emblema de la ciudad y uno de los lugares imperdibles en Ciudad del Cabo. Una de las siete maravillas naturales del mundo, donde podrás disfrutar de las mejores vistas de la ciudad.
si hay un barrio cool que ahora está muy de moda en Ciudad del Cabo, y que tenés que descubrir es el antiguo barrio malayo de Bo-Kaap. Con sus casas pintadas de colores estridentes, es el lugar ideal para tomar la foto Instagram del viaje.
una animada e interminable calle de 3.800 metros en la que se concentran restaurantes de todo tipo, bares y pubs y todas las culturas de la ciudad. Idealizara ir de compras, hay negocios locales que venden artesanías, arte africano y mucho más.
visitar esta isla en ferry a 12 km de la costa es una experiencia fundamental para conocer una parte de la historia más oscura de este país. Allí está la carcel en la que pasó 18 años preso Nelson Mandela, el padre de la Sudáfrica libre.
el mejor momento para visitar esta montaña es durante la salida o la puesta de sol, cuando la luz es más tenue y el reflejo del agua permite disfrutar de toda la panorámica, sacar buenas fotos y hasta hacer un vuelo en parpente.
en esta histórica plaza en el centro de la ciudad todos los días hay un mercado de pulgas, coffee shops donde relajarse después de un día de paseos.
el muelle de Victoria & Alfred, conocido simplemente como Waterfront, es una zona repleta de bares, restaurantes, pequeñas tiendas y centros comerciales.
otro imprescindible que hay que visitar son las colonias de pingüinos africanos que viven en esta playa protegida entre rocas de granito.
es el más grande del mundo, con más de 500 hectáreas y 9000 especies diferente de plantas. Declarado Patrimonio Universal de la Unesco, es un paseo imperdible.
es otro de los rincones que esconde Ciudad del Cabo y una de las playas favoritas para quienes practican deportes en el agua. Además de su belleza, del agua y la cercanía a la ciudad, sus vistas a la isla Robben y table Mountain son increíbles.
Es la capital gastronómica de Sudáfrica. Explorar la cocina de “Arco Iris” sudafricana es sumergirte en una combinación de influencias multiculturales. Visitar una tostadora de café hipster, una cervecería artesanal en Woodstock, degustar un vino sudafricano o vivir los mercados gastronómicos es buena parte del viaje.
- Boerewors: son las salchichas más típicas de la gastronomía sudafricana, hechas con carne de ternera picada, mezclada con cerdo y/o cordero, aderezada con especias como el cilantro, la pimienta negra, el clavo o la nuez moscada.
- Poetoepap o pap: es una pasta hecha con maíz blanco y carne que suele servirse como acompañamiento. Es, de hecho, el alimento básico para distintas tribus o sudafricanos sin demasiados recursos económicos.
- Bobotie: una especie de pastel de carne elaborado con carne picada de cordero y cerdo, aunque en la actualidad se emplea también la carne vacuna, con huevo, jengibre, limón, hierbas, curry o cebollas picadas.
- Potjiekos: este cocido sudafricano se cocina en una olla de hierro al aire libre, incluye verduras como la coliflor, la calabaza, el repollo o la zanahoria combinadas con carne al gusto o patatas.
- Vino de Sudáfrica: con una producción vinícola de renombre internacional, gracias al Cabernet-Sauvignon o al Pinot Negro entre otros, no dejes de disfrutar de una copa de vino con acento sudafricano.
TIP DE AMIGO: para los golosos, no deben dejar de tomar un café con un pastel en Charly’s Bakery, una pastelería famosa por salir en un programa de televisión.
Viajamos Juntos!